Cirugía de Mohs
Si padeces cáncer de piel, intervenirlo mediante cirugía de Mohs es el mejor tratamiento posible. Garantiza la extirpación teórica del tumor en un único acto.
El Dr. Toledo es el primer cirujano de Mohs y el único con ejercicio exclusivamente privado acreditado por la European Society for Mohs Surgery para realizar esta técnica en el sur de España.
Saber másExperienciaLa técnica más exitosa
La cirugía de Mohs es el tratamiento más avanzado, preciso y eficaz para una variedad cada vez mayor de tipos de cáncer de piel. Mediante Mohs, los dermatólogos podemos identificar y eliminar con precisión un tumor completo, dejando el tejido sano circundante intacto e ileso. Ofrece el mayor potencial de curación, incluso si el cáncer de piel ha sido previamente tratado por otro método (de hecho, es la técnica de elección para estos casos). Esto es muy importante, sobre todo cuando bastantes tipos de cánceres de piel aparecen en sitios tan sensibles como la nariz, los labios o alrededor de los ojos.
La cirugía de Mohs la tasa de éxito más alta de todos los tratamientos para el cáncer de piel: hasta el 99%
Operar mediante Mohs implica la eliminación quirúrgica del cáncer de piel capa por capa y el examen del tejido bajo el microscopio hasta que se alcanza el tejido sano y libre de cáncer alrededor del tumor (lo que llamamos “bordes libres”). Los cirujanos de Mohs no sólo estamos especialmente entrenados para realizar la técnica, sino también el procedimiento reconstructor. El examen de cada pieza se lleva a cabo por un especialista en Anatomía Patológica, inmediatamente a la extirpación del tejido sospechoso.
¿Cómo es la intervención?
Elimina completamente
el tumor durante la cirugía
Minimiza la cantidad de
tejido sano perdido
Resultado funcional
y estético
Repara el sitio de la
intervención el mismo día que el tumor es extirpado
¿Y después de ser intervenido?
Debido a la alta tasa de éxito de esta técnica, la mayoría de los pacientes requieren sólo una intervención. Esta cirugía normalmente incluye en la inmensa mayoría de los casos también la reparación de la herida.
Disminuye casi a cero la posibilidad de reaparición del tumor
Asegurarnos quitar todo el tumor en un procedimiento tiene dos ventajas muy importantes. La primera, que el resultado estético de la cirugía se optimiza, al extirpar sólo lo justo y necesario. La segunda, al disminuir casi a cero la posibilidad de la reaparición del tumor, se eliminan los costos personales y económicos de cirugías más grandes y más serias. Esto hace también que no sean necesarias revisiones periódicas.
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